
Sobre las artistas
ROSA BALAGUER

ROSA BALAGUER
La figuración de Rosa Balaguer está marcada por el trazo impresionista y el tratamiento del color. Le gusta ahondar en la temática acuática, probablemente influida por los años que pasó en su juventud dentro de la piscina, en un equipo de natación. En esas obras evoca a veces nuestra lucha diaria ante problemas y conflictos, representando la energía de buceadores sumergidos que pugnan por no hundirse y por emerger en búsqueda de oxígeno y de vida. Otras veces plasma la calma de nadadores en superficie, mecidos por la inmensidad de océanos tranquilos, en momentos de superación quizá de la oscuridad de las profundidades existenciales.
Pero Rosa también trabaja temas cotidianos, intimistas, que son refugio frente a las adversidades. Son los que se pueden contemplar en esta exposición, en la que toma, de momento, distancia respecto a sus característicos azules oceánicos, para recuperar el gusto por el retrato y las escenas que cuentan historias familiares y cercanas. Los colores brillantes de estas obras sorprenden y otorgan un protagonismo inusitado a los personajes, que se apoderan de la imagen en cuadros desprovistos de fondo definido.
CARMEN C.

Ha estudiado pintura en el estudio de Conchita De La Cueva (Zaragoza) En su última etapa se ha sentido más cómoda con el trabajo volumétrico de la escultura que es en lo que actualmente trabaja y expone. Carmen C. forma parte de los artistas recientemente seleccionados como artistas residentes de la galería Olga Julián 2025.
Aragonesa, Carmen C. destaca por realizar esculturas en mortero con látex y pintadas con acrílicos y pinturas especiales para exterior. Realiza escultura figurativa, cabezas, peces, nadadoras…pero también trabaja obra abstracta. En esta última destaca por la sensación de fragilidad de las obras pese al material utilizado. Sus tótems son esculturas compuestas por esferas coloridas de formas irregulares dispuestas una sobre la otra que parecen flotar dando sensación de falta de equilibrio. Se sujetan en diferentes pedestales sobre los que descansan amenazando constantemente con caerse, un recuerdo de la fragilidad de la vida.